Una gran parte de la población sufre de ronquidos, ruidos que son compañeros indeseables en la cama, pues afectan al descanso y provocan cansancio y mal dormir. Desde Flex te contamos por qué aparecen y algunos tips para evitarlos.
Después de un largo día, lo único que necesitas es descansar y tener un sueño reparador. Sin embargo, si tú o tu pareja sufren de ronquidos, ese reposo puede ser perturbado. Estos sonidos roncos se producen cuando las vías respiratorias se reducen o relajan y comienzan a obstaculizar el paso del aire.
A pesar de que roncar puede ser habitual entre las personas, cuando se prolongan por semanas o meses pueden resultar bastante molestos. Las causas pueden ser múltiples, pero en general suceden por una mala postura al acostarse, agotamiento, estrés, embarazo, desviación del tabique, la toma de algunos medicamentos -como sedantes- o incluso condiciones médicas más serias, como la obesidad o apnea del sueño.
Si sospechas que puedes estar sufriendo de un problema de salud, no dudes en contactar a un médico especialista en trastorno del sueño. Sin embargo, desde Flex te damos algunos consejos prácticos para reducir o desaparecer los ronquidos:
1) Encontrar la posición correcta
Los ronquidos pueden aparecer en personas que se suelen dormir boca arriba, ya que esta posición provoca que las vías respiratorias se estrechen y, por consiguiente, se obstruya el flujo del aire y comiencen los sonidos molestos.
La forma de dormir más recomendable para evitarlos es de lado. Si es que tienes problemas para acomodarte en esta postura, puedes ayudarte con una almohada entre las rodillas para sentir más estabilidad en la columna.
No obstante, si notas que los ronquidos siguen apareciendo a pesar de dormir de costado, puedes intentar levantar tu cabeza con una almohada extra para facilitar la respiración.
2) Tomar más agua
Además de que es bueno para tu salud en general, hidratarte puede ayudar a dejar de roncar, ya que evita la congestión y, así, no obstruye el paso del aire a través de tus fosas nasales mientras duermes. Idealmente debes beber 2 litros de agua diarios.
En invierno las personas suelen tomar menos agua, por tanto, nuestro consejo es que, al ir a acostarte, tengas un vaso de agua en tu velador y que, durante el día, dejes vasos en los espacios que más utilizas en casa para recordarte mantenerte hidratado. También puedes optar por infusiones tibias para no sentir frío.
3) Dormir de 7 a 8 horas
Dormir poco te provocará agotamiento y, por tanto, es probable que al acostarte los músculos de tu lengua y garganta se relajen excesivamente, lo que obstruirá tu vía aérea y dará paso a los molestos ronquidos.
Por tanto, es importante darle a tu cuerpo entre 7 y 8 horas de buen dormir, además de procurar tener un colchón cómodo que permita relajarte y tener un sueño reparador.
4) Evitar fumar y/o tomar alcohol
El alcohol y el tabaco o cigarrillos causan congestión. Si es que fumas habitualmente, procura no hacerlo cuatro horas antes de acostarte dado que el humo irrita e inflama los músculos de la garganta, dificultando el paso del aire. Además, procura limitar tu consumo de bebidas alcohólicas en la semana y, en especial, antes de dormir.
5) Haz ejercicio
Una vida sedentaria tiene el potencial de provocar ronquidos al dormir, por lo que moverse y hacer ejercicio puede influir positivamente en tu descanso libre de sonidos molestos.
Muchas veces, el sobrepeso provoca que tengas tejido adicional en tu cuello y garganta que provoca mayor estrechez en las vías respiratorias. Este cambio de hábito puede ayudarte a minimizar tus ronquidos y llevar una vida más saludable.
Consejo extra: Controlar tus alergias
Si eres una persona que suele sufrir de reacciones alérgicas, ya sea todo el año o en estaciones específicas (como la primavera), controlarlas con un especialista puede ayudarte a deshacerte de los ronquidos.
Lo importante es lograr identificarlas para evitarlas y tratarlas con un profesional, pues son causa de congestión e inflamación de la mucosa nasal que muchas veces no permite tener un descanso adecuado.
Además, procura limpiar tu colchón periódicamente para eliminar los posibles alérgenos que se encuentren en tu habitación y así poder respirar mejor.
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¡El descanso nocturno es fundamental para afrontar el día a día con energía! Si bien roncar una que otra vez es normal, hacerlo por largos periodos será desgastante para ti y para quienes duermen cerca tuyo. Pon a prueba nuestros tips o visita a tu médico de cabecera si sospechas tener un problema de salud crónico.
¡Desde Flex, te deseamos un sueño reparador, libre de ronquidos molestos!